“El fin de una época”

"El fin de una época" es un libro brillante en el que el periodista Inaki Gabilondo reflexiona y analiza las amenazas y grandezas del periodismo, la profesión a la que ha consagrado una vida. Deja claro los principios que es imperioso sostener y que han definido una trayectoria modélica. Durante el libro se trata  el temor a la desvaluación de un oficio necesario, el periodismo.

Hay muchos aspectos del libro que me han gustado y me han sorprendido. Uno de ellos es cuando el autor deja claro que la información no es conocimiento diciendo: “tener información tan solo es el primer paso para conocer, pero conocer implica mucho más”.

 Se debe complementar la información a partir de otros elementos que consigan que las personas reflexionen y entiendan, ya que el conocimiento solo se alcanza cuando verdaderamente se entiende lo que ocurre. Este es el mayor propósito al que desea llegar un periodista, es la persona encargada de ayudar a comprender a los demás su papel en la sociedad.

 Para lograrlo son necesarias “las cuatro ces” que apunta Gabilondo: conocer, confirmar, comprender y contar. Nadie podrá entender lo que está pasando si previamente no lo entendemos nosotros. Un verdadero periodista es un explicador de lo que ocurre, debe estar permanentemente en fase de conocimiento para comprender mejor los hechos y así aclarárselo más tarde a los lectores.

Este oficio solo tiene sentido si te importa el destinatario. Pero actualmente esta idea está modificándose y se piensa en el destinatario como sinónimo de rentabilidad económica. El periodismo está evolucionando hacia esta línea, la de buscar la máxima rentabilidad hasta el punto de afectar al propio periodismo. “En lugar de centrarse en el papel difusor de un determinado mundo de valores y pensamientos, el periodista está siendo desbordado por la lógica económica”, aclara Iñaki Gabilondo. El espíritu empresarial se está apoderando de la profesión, que cada día más solo gira en torno al dinero. Se está eliminando el periodismo explicativo de la realidad, ahora solo interesa centrarse en aquello que más gusta y más mayor audiencia genera.

El periodismo debería desarrollarse de acuerdo con unos parámetros intocables, debería permanecer  a salvo de cualquier modificación empresarial que se produjera y seguir con su cometido. Por eso debemos protegerlo y conseguir que sea un oficio respetable por la gente ya que la gente lo necesita de alguien que le cuente y explique la realidad, por eso no debemos desvirtuarnos ,no importa las condiciones que se den.

Destacaría una inmensa cantidad de cosas del libro, pero estas son las que me han impactado más y han logrado que quiera luchar todavía más por un periodismo de calidad.